Hay que preparar a los jóvenes para la edad adulta, para que estén preparados para usar sus genitales de forma adecuada y segura. La señora les muestra la técnica del coito, les enseña a chupar y tragar y les demuestra con ejemplos personales cómo conseguir un orgasmo. A los jóvenes les gusta mucho la lección: absorben todos los conocimientos con verdadero interés. La mujer adulta parece bastante satisfecha con el resultado. No me cabe duda de que repetirán la lección por su cuenta.
Ciertamente es más fácil para las alumnas en cuanto a los exámenes. No es frecuente que las profesoras se aprovechen de los alumnos varones con el mismo fin, pero los profesores no tienen remilgos al respecto. Las chicas son buenas, saben lo que quieren conseguir en la vida y persiguen esos objetivos, a pesar de las prohibiciones y de la opinión pública. Me pregunto si debería haber elegido otra profesión...